Esta pareja es una de las intimidades del festival que este año compartimos con todo nuestro público.
Paco y Tere vinieron un año a Úbeda por motivos personales, a visitar a sus amigos Javier y Beni, coincidiendo con el segundo Festival de Cuentos, el primero que se hizo con el formato que desde entonces se conoce y que viene realizándose año tras año. Se implicaron de lleno en la organización, preparando recorridos, llevando y trayendo de aquí para allá lo que se les solicitaba y con lo que ellos, con sus niñas mellizas, entendían que podían ayudar. De ahí surgió una sinergia entre la organización, las narradoras y los narradores y el público, que les hace repetir año tras año. Y no solo acuden al Festival, sino que nos obsequian con chocolates y frutos secos, que son los productos que realizan casi de forma artesanal, que se reparten entre quienes cuentan y quienes colaboran. Paco y Tere poseen la virtud de ayudar sin estorbar, de crear lazos de amistad y de difundir el festival fuera de nuestras tierras y allí donde la naranja ocupa los campos, que aquí son de olivas, llevan los cuentos. Y cada edición se traen a sus mejores amigos que sirven de altavoz en Chella, un bello pueblo de la comarca de Enguera de la provincia de Valencia. Ellos trabajan en su fábrica de chocolates y frutos secos rebozados en chocolate blanco, en fresa, en vainillas aromatizadas con canela... Unos productos que se convierten año tras año en acicate para quienes narran y para quienes colaboran, puesto que a modo de regalo/recompensa por su trabajo y partipación los reciben al acabar cada Festival.
Muchísimas gracias por compartir con nosotros vuestro tiempo, vuestras ilusiones y toda la alegría y el cariño que le ponéis al festival, el mismo con el que os recibimos cada año desde hace tantos ya.
Algo nuestro va quedando en vuestro ánimo y se os nota
Y aquí está el pregón que nos han preparado para anunciar En Úbeda se cuenta 2015
Dicen que hay un cuento que cuentan,
que por San Juan en Úbeda se cuenta.
Que vienen contadores de otros pueblos,
de otros mares y de los mismos cerros,
que traen cuentos y relatos
embustes, quimeras y engaños,
chismes, ficciones y enredos.
Que cuentan para todos, vecinos, turistas y extraños,
para chicos y chicas, grandes, pequeños y medianos,
para amigos y enemigos, amantes fieles o maridos engañados,
para el viajero de paso y el del pueblo de al lado.
Dicen que cantan canciones para sordos
y que pintan cuentos para ciegos,
que traen llaves que abren corazones
y algunas fábulas sin Esopo.
Si vienes, oirás leyendas que quitan el sueño
y también alguna historia para cogerlo,
cuentos del futuro que pasaron hace muchos años
e historias de amor para desenamorados.
Ven a volar por las plazas de Úbeda,
llenas de magia con magos.
Si no te lo han contado, ven y que te lo cuenten.
Si ya te lo han contado, ven para volver a oírlo.
Trae contigo a propios y extraños,
a la vecina de arriba o al pariente lejano.
Porque dicen, que hay un cuento que cuentan,
que por San Juan en Úbeda se cuenta.
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